“Consumer Health en el punto de mira”. Nunca un título definió mejor una situación. Y es que, si bien es cierto que las ventas de los productos de consumer health (CH), ya en una senda descendente desde hace años (ver tabla), se mantienen en números rojos e incluso en algunos casos han acentuado su caída, no es menos cierto que esto se perfila al mismo tiempo como una oportunidad. Así, según Javier Castro, IMS Consumer Health Manager, se está produciendo un “cambio radical en las tendencias y dinámicas del mercado”, por lo que se avecinan muchos cambios en este sector.
De momento, con un mercado de 4.900 millones de euros en el último ejercicio, se ha producido un descenso en valores del 0,5 por ciento de 2009 a 2011, produciéndose la mayor caída, casi un tres por ciento, en el último año. Y lo mismo ocurre con el número de unidades vendidas, que han descendido casi un cuatro por ciento entre 2009 y 2011, situándose la mayor caída, un 5,4 por ciento, también entre 2010 y 2011.
En un entorno de crisis, que está cambiando las oportunidades del mercado, y con un real decreto-ley, el 9/2011, que no solo afecta a los medicamentos éticos, sino también al sector CH, Castro considera que se avecina un cambio de paradigma del que todavía no se conocen las características. En alusión a un símil con la burbuja inmobiliaria, Castro cree que ya se produce una sucesión de pequeños cambios que, al igual que ya ocurrió con la citada burbuja inmobiliaria, terminarán estallando y provocando este previsible cambio de modelo.
Cómo afectará esto realmente al mercado CH y al sector farmacéutico en general son datos que Castro todavía no se atreve a prever. Pero lo que sí anuncia este experto es que, ahora mismo, se está produciendo un “efecto sándwich” del mercado CH, asfixiado por un lado por los medicamentos éticos y, por otro, por las grandes superficies como centros comerciales o supermercados, el llamado mass market. Y es precisamente de esta situación de la que puede sacar partido el farmacéutico. ¿Cómo? Diferenciándose y ofreciendo el valor añadido que supone el consejo de un profesional sanitario a pie de mesa.
Prueba de esta necesidad de diferenciación actual es que, con la llegada de la crisis, muchos laboratorios comenzaron a subir el precio de sus productos, una estrategia que solo les funcionó a aquellos productos que contenían algún tipo de innovación o que estaban posicionados claramente en el mercado.
Y los análisis estadísticos avalan totalmente esta tesis: el repunte del 8,2 por ciento (ver tabla) en las ventas de CH durante el tercer trimestre de 2009 (de julio a septiembre) son precisamente debidas al lanzamiento de Alli, el adelgazante de GSK que, pese a que se lanzó al mercado con un precio bastante elevado, contenía una verdadera innovación. A este incremento de los porcentajes de 2008 también contribuyeron los lanzamientos de Somatoline, Revidox o Clearblue.
A este panorama hay que añadir también la caída del 16 por ciento en el stock medio de las oficinas de farmacia y el descenso de un 11,5 por ciento en la facturación, unos datos que revelan que ha llegado el momento de que las boticas hagan algo al respecto. Y la apuesta por el mercado CH se percibe como una clara oportunidad ya que, según Castro, a día de hoy “vender cien euros de productos éticos genera a las oficinas de farmacia los mismos beneficios que la venta de cincuenta euros de productos de consumer health”.
Y si a esto se añade que estos productos evitan los impagos, ya que el farmacéutico recibe el dinero del cliente o paciente en el acto, y además suelen ser algo más caros, el futuro hacia el que deben caminar las boticas parece verse algo más claro. De momento, el mercado de CH solo supone el 25 por ciento del mercado en valores y el 32 por ciento en unidades, unos porcentajes que se han mantenido bastante estables a lo largo de los últimos años.
Nutrición enteral
Con la mayoría de los diferentes mercados de CH estancados o en decrecimiento, la nutrición enteral es el único segmento que ha experimentado un aumento en las ventas, si bien los laboratorios especializados en la producción de estos productos sí han visto mermado su crecimiento. Por el contrario, la nutrición infantil, otro de los grandes segmentos dentro de la cuarta categoría del mercado CH, la nutrición, ha sido, en palabras de Castro, uno de los sectores más afectados por la caída en las ventas, por el desvío de las consumidoras, muchas de ellas inmigrantes, al mercado de masas.
La primera de las categorías, los OTC (que engloban los medicamentos publicitarios, los productos de consumo y los semiéticos), aunque se ha mantenido más o menos estable durante los últimos dos años, ha experimentado una caída en las ventas del 1,8 por ciento en el último año, debida principalmente a la reducción en volumen. En esta categoría, destaca sobre todo el desarrollo de los productos indicados para el aparato urinario, por la liberalización de la píldora poscoital, y los tratamientos para dejar de fumar, por la ley antitabaco.
Además, también aumentaron las ventas en productos indicados para el aparato digestivo, un crecimiento motivado sobre todo por el auge del mercado de los probióticos. Otro detalle significativo es la importante recesión que han sufrido los analgésicos, sobre todo por la competencia que existe con los medicamentos sujetos a prescripción médica.