A día de hoy, impulsar la formación del farmacéutico hospitalario y crear nuevos perfiles profesionales ha pasado a ser una necesidad. En este sentido, durante los últimos años, la terapia génica se ha convertido en todo un reto para los servicios de farmacia de los hospitales. Motivo de ello, desde la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) han elaborado el “Decálogo de Terapia Génica en los Servicios de Farmacia Hospitalaria”, una guía práctica para orientar a los profesionales que comienzan a trabajar con esta innovadora terapia. En este documento, como punto indispensable, alegan que es esencial que se cree la figura del farmacéutico hospitalario especialista en terapia génica (TG). “Esto facilitará y fomentará el liderazgo de equipos tanto en el Servicio de Farmacia (SF) como en el centro hospitalario y tendrá una implicación en los procesos farmacoterapéuticos”, aseguran.
De hecho, indican que es necesario fomentar nuevas habilidades y conocimientos en biología molecular e inmunología en la formación pre-grado y postgrado de los farmacéuticos para afrontar los nuevos retos relacionados con estas terapias. Además, apuestan por la promoción de la formación continua de los farmacéuticos hospitalarios en este campo como una herramienta básica dentro de los programas de docencia. En esta línea, demandan que se incluya formación específica en la manipulación de medicamentos de estas terapias y su crioperservación. “Se debe incorporar al farmacéutico hospitalario especialista en estos tratamientos en puestos estratégicos de evaluación y seguimiento de nuevos medicamentos”, sostienen.
Más recursos y estrategias
Otra de las cuestiones que reivindican es que se garantice que los SF dispongan de la adecuada dotación de recursos para asegurar una atención farmacéutica óptima y de calidad para los pacientes. “Es indispensable dotar a los SF de los recursos humanos y materiales necesarios para garantizar la viabilidad, calidad y seguridad de estos tratamientos”, subrayan. Además, indican que se debe “determinar la incorporación de farmacéuticos clínicos en las líneas estratégicas de actuación dentro del proceso de atención integral del paciente”.
Desde la SEFH también reclaman que se establezcan estrategias en los SF que garanticen la seguridad, calidad y trazabilidad de los tratamientos en los pacientes. “Hay que reforzar la responsabilidad legal que ha de tener el SF en la adquisición, conservación, custodia, acondicionamiento y dispensación de TG a los servicios clínicos, señalan”. Asimismo, añaden que se debe “incorporar al farmacéutico hospitalario en el Comité de TG del Centro Hospitalario”.
Investigar para impactar sobre la salud
Con respecto a la labor investigadora, la Sociedad recalca que se promueva la realización de ensayos clínicos en el entorno de la Farmacia Hospitalaria y se fomente el desarrollo de proyectos de investigación con medicamentos de terapia génica en el ámbito académico. Por ello, indican que se deben crear en los SF estructuras adecuadas para la gestión de ensayos clínicos con medicamentos de TG, que permitan adaptarse a las peculiaridades de estas terapias, de forma que garanticen su calidad, seguridad y trazabilidad. Además, aseguran que se debe apostar por la colaboración en proyectos de investigación relacionados con este área y por la participación activa del farmacéutico en todos los Comité de Ética de la Investigación con Medicamentos (CElm).
Por otra parte, la SEFH hace hincapié en que “se tiene que evaluar y difundir resultados obtenidos en práctica clínica real para maximizar las oportunidades de mejora en el tratamiento de los pacientes”. En esta línea, prosiguen alegando que se debe potenciar en los SF estrategias firmes y robustas de TG alineadas con las directrices del centro hospitalario, comunidad autónoma y del Ministerio de Sanidad.
Promoción de la farmacovigilancia y humanización
Entre las últimas recomendaciones se encuentran la promoción en los SF de una farmacovigilancia activa de seguimiento post-administración de los tratamientos de TG. También inciden en la importancia de fomentar la cooperación entre los diferentes servicios, tanto de centros hospitalarios públicos como privados. Asimismo, aseguran que, a su vez, se debe ayudar a que la industria farmacéutica adopte acuerdos con la administración para optimizar los recursos humanos, económicos y tecnológicos relacionados con la TG.
Finalmente hacen referencia a la humanización de todo el proceso. “El paciente tiene que ser el centro de la estrategia de TG para el SF y para el Centro Hospitalario”, afirman. Para lograrlo, establecen como crucial que se vincule al farmacéutico experto en TG con el paciente, cuidador y el resto de los profesionales sanitarios y que se elabore material dirigido específicamente a los pacientes para favorecer la educación sanitaria y el empoderamiento de los pacientes. “Se debe fomentar a colaboración con las asociaciones de pacientes y familias de candidatos a recibir TG e impartir sesiones formativas para abordar las preocupaciones y preguntas de los pacientes”, concluyen.