El reciente acuerdo entre el Gobierno —a través de los Ministerios de Sanidad, Transición Ecológica y Reto demográfico, y Derechos Sociales y Agenda 2030— y el Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCOF) para impulsar a la farmacia rural a través de un pilotaje en La Rioja es, por un lado, un reconocimiento a la labor de los profesionales que trabajan en estas zonas y por otro, una oportunidad de establecer un marco normativo que desarrolle más servicios farmacéuticos asistenciales. Así lo explican los vocales consultados por EG, que se muestran satisfechos por un protocolo que nace como pilotaje en La Rioja, pero que tiene vocación de implantarse a nivel nacional.
“Es un acuerdo que da importancia y visibilidad a la farmacia rural”, expresa Maite Vicedo, vocal de farmacia rural del Muy Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia (Micof). Este tipo de alianzas son necesarias porque la colaboración entre las boticas y las Administraciones “mejora la vida de las personas que viven en el mundo rural“. Vicedo habla desde la experiencia del Micof que, desde hace tiempo, realiza una cooperación necesaria para atender a los ciudadanos que viven en estas zonas: “Es muy satisfactorio que esta colaboración se realice a nivel nacional”.
Esperanza del Campo, vocal de Farmacia de La Rioja, considera que la alianza entre Gobierno y CGCOF “implica un reconocimiento para el farmacéutico, que en muchos casos es la única autoridad sanitaria para la población que vive en el ámbito rural”. Por su parte, Álvaro Borobio, vocal autonómico de CONCyL de farmacia rural, considera que “las primeras impresiones son muy positivas. Es esencial implicar a las Administraciones y que sean sensibles a la capacidad asistencial, social y digital de la OF en el medio rural”. Un concierto que es muy relevante para Castilla y León, explica Borobio, porque por sus características poblacionales estas farmacias adquieren un gran importancia.
Todos argumentan que hay un gran trabajo detrás que no es ostensible y que se tiene que valorar tanto en palabras como en hechos. “Es un trabajo invisible, —lamenta Vicedo— como si no hicieras nada. Con estos convenios podemos hacer que se vea que, gracias a nosotros, esa población está atendida”. Una opinión que comparte Esperanza del Campo: “Es poner en valor le trabajo que hacemos y poner en valor al farmacéutico rural”. Un beneficio que redundaría tanto en el paciente, como en el propio sistema sanitario. Ya que, si su labor estuviera protocolizada, valorizada e integrada en el sistema sanitario, ahorraría muchos recursos. “Esta es una gran oportunidad de demostrar que la OF, especialmente en las zonas más despobladas, es un recurso al servicio de la ciudadanía de un valor inigualable”, evidencia Borobio.
Proyección de futuro
¿Qué esperan de este acuerdo marco? Para Vicedo el objetivo es que se potencie “la vertiente asistencial, que es la que más trabajamos en la farmacia rural”. Porque desde las boticas en los pequeños municipios no sólo se lleva a cabo la dispensación, también realizan labores de indicación, control y seguimiento, consejos nutricionales o uso racional del medicamento.
Del Campo se suma a esta reivindicación: “Si le damos relevancia al farmacéutico rural podemos ofrecer una mayor cartera de servicios, esta es la vía para que sea posible”. Se trata por un lado no sólo reconocer aquellos servicios que ya se realizan, también ampliar otros, pero que necesitan de un respaldo normativo detrás. El objetivo es “contribuir de forma decidida a la viabilidad económica a través del impulso de un modelo renovado e integral de asistencia sociosanitaria”, defiende Borobio.
Aunque la colaboración empieza como programa piloto en La Rioja, el objetivo es que se extienda por todo el territorio nacional y llegue a cada rincón de la geografía española. “Es un primer ladrillo, ahora tocará que cada municipio trabaje en lo que corresponde”, comenta Esperanza del Campo. “Esperamos que esto sea una medida para que todas las farmacias rurales del territorio tengamos las mismas condiciones para ofrecer los mismos servicios”, concluye Vicedo.