E. CAMPILLO Santander | viernes, 09 de febrero de 2018 h |

Bien podría ser calificada como la ‘historia interminable’ y es que desde que en 2015 la Consejería de Sanidad cántabra convocara el concurso para la apertura de nuevas oficinas de farmacia en la comunidad, a día de hoy, esas aperturas no están, pero se les sigue esperando.

Tras siete recursos presentados contra el concurso, el último capítulo que se suma a este cisma es la decisión de la propia Consejería de suspender el acto público de adjudicación de 33 farmacias, previsto para el pasado 3 de febrero.

El departamento de Sanidad tomaba esta decisión después de que el pasado 8 de enero una farmacia de Noja presentara ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia un escrito solicitando la ejecución provisional de la sentencia dictada por esta Sala, fechada el 7 de julio de 2017, en la que estimaba parcialmente la demanda interpuesta en el referido procedimiento y anulaba la Orden de Sanidad de 9 de marzo de 2015 en lo que se refiere a la omisión en la zona de Noja de la delimitación de la ubicación prescrita en la Ley de Ordenación Farmacéutica de Cantabria.

“Estamos pendientes de la resolución definitiva del juzgado y cuando haya esa resolución actuaremos en consecuencia”, matizaba Luisa Real, consejera de Sanidad de Cantabria quien defendía su posición argumentando que así se garantizaría la máxima seguridad jurídica del procedimiento en curso. No obstante, Real no daba plazos sobre cuando podría resolverse “porque es algo que depende exclusivamente del juez”.

El caballo de batalla del COF

Por su parte, Marta Fernández-Teijeiro, presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cantabria confirmaba a EG que ya se ha recurrido, en casación, la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, del pasado mes de noviembre, que desestimó el recurso interpuesto por el COF y dio luz verde a la apertura de las boticas.

“Deberíamos habernos sentado antes y ver soluciones, pero ahora el tema está en Consejo de Gobierno y es más difícil ponernos a solucionarlo. Siempre hemos trabajado codo con codo con la Consejería y hemos tendido la mano para determinadas cosas pero hay asuntos en los que no podemos decir Amén Jesús”, sentenciaba.

Fernández-Teijeiro señalaba que el Colegio de Farmacéuticos sigue teniendo las mismas discrepancias con la Consejería, no en cuanto al número de farmacias se refiere, que son las que dice la ley, sino con las diferentes interpretaciones de algunos aspectos que refleja la Ley de Ordenación Farmacéutica de Cantabria. En este sentido defendía que “hay que delimitar las zonas de ubicación de las farmacias si se tiene en cuenta la población flotante y las segundas residencias, tal y como refleja el artículo 21.2 de nuestra LOF, y si no, que lo hubieran quitado”.

La presidenta de los farmacéuticos cántabros entiende que para los profesionales que están pendientes de la adjudicación de las farmacias es una situación complicada, pero “lo que nosotros tenemos que mirar es que los argumentos que tiene ahora la Consejería no prevalezcan para sucesivos concursos de farmacia, incluso tendremos que cambiar la LOF porque consideramos que algunas cosas están obsoletas, pero de momento tenemos esta”.

En cuanto a la ‘congelación’ de la adjudicación de farmacias, Fernández-Teijeiro consideraba que “la Consejería debería haber seguido adelante si tiene fundamentos sólidos, no porque se pongan recursos se debe parar la Administración”.

En la hipotética situación de que, finalmente, se siga adelante y se abran las farmacias, “nosotros defenderemos a esos farmacéuticos al cien por cien porque una cosa es la diferencia de criterios, y otra, la manera de trabajar para y por los farmacéuticos por el bien de los pacientes”, especificaba la presidenta del Colegio de Farmacéuticos.